La Guerra Invisible Sesión 4

Los Antídotos de Dios para la tentación

Bienvenidas a nuestra cuarta sesión de nuestro seria de “La Guerra Invisible”

En nuestra última charla mencione tres escrituras acerca de los 3 tipo de tentación, “Los malos deseos de la carne” “La Codicia de los ojos” “La arrogancia de la Vida. 

•         Los deseos de la carne, pueden incluir comida, dormir, drogas, televisión, puede incluir un paseo emocionante, puede incluir cualquier cosa que me haga sentir bien. Y nuevamente no hay nada de malo en sentirse bien, pero hay formas legítimas y formas ilegitimas de sentirse bien. Es el deseo de sentirse bien o de complacer. 
•         La codicia de los ojos: es la tentación de tener. Y la forma en que funciona es esta: cuando yo veo algo yo quiero tenerlo. Si no pudieras ver algo no quisieras tenerlo y eso es por lo que los anunciantes te envían algo: catálogos. Los catálogos son herramientas de satanás, ellos crean un deseo en ti que tú no sabías que necesitabas. Así que la codicia de los ojos es yo lo veo y yo lo quiero. No es el deseo de complacer, es el deseo de incrementar, primero es el deseo de complacer mi carne, el segundo es el deseo de incrementar mis posesiones, esa es la codicia de los ojos.
•         La arrogancia de la vida, es la tentación de ser. Es él yo quiero ser famoso, yo quiero ser amado, yo quiero ser querido, yo quiero ser popular. Ahora, no hay nada de malo en querer ser amado eso es un deseo innato en cada uno. Necesitas amor y necesitas afirmación. Pero la diferencia entre una necesidad y una codicia es que la codicia es una necesidad natural llevada al extremo. 

Quiero retomar de los puntos que acabo de mencionar y vamos a ver como esos tres tipos de tentación están expresados en nuestra cultura y él va hablarnos a través de las escrituras como cada una de estas cosas retan la suficiencia de Dios, la santidad de Dios y su soberanía. 

EL día de hoy hablare de los antídotos para la tentación, te invito s que tengas tu libreta, plumas o plumones para anotar todo lo que consideres importante y en el área de los comentarios se encuentra el material para el día de hoy. 

Recuerda no importa si tu biblia esta en tu celular, en tu tableta, computadora o en el libro físico, lo mas importantes es que la leas y estudies. 

• Tipo Uno: Los deseos de la carne, la palabra filosófica para esto es Hedonismo: que nos dice que la cosa más importante de la vida es el placer por que esta es la única manera de disfrutar la vida.  Si se siente bien hazlo esto te hará feliz. 

La felicidad es un subproducto de la santidad. Si haces que la felicidad sea la meta de tu vida, nunca serás feliz porque es elusivo.

• Tipo dos: La codicia de los ojos es Materialismo. El materialismo dice que lo más importante del mundo son las cosas. Nos dice que la vida se trata de la adquisición de cuantas cosas posees. La publicidad nos dice, “No eres nada hasta que tienes esto”.

Jesús nos dijo: “la vida de un hombre no consiste en la abundancia de cosas que posee”. La vida no se trata de cosas. Las cosas más importantes en la vida no son cosas. 

• Tercer tipo: La arrogancia de la vida y eso se llama Humanismo: Nos  dice “Yo no necesito a Dios”. Ahora por su puesto que los ateos son humanistas seculares, “no necesitan a Dios”.

La biblia dice: “el necio dice en su corazón, no hay Dios” pero muchos cristianos son ateos prácticos. Actúan como ateos. Cada vez que te preocupas estas actuando como un ateo. Cada vez que te preocupas estas actuando como si Dios no cumple sus promesas.

Así que estas tres filosofías: Hedonismo, Materialismo y Humanismo.

Ahora, ves cómo realmente estas tres tentaciones son los fundamentos de nuestra cultura y para poder vivir una vida contra la corriente tienes que identificar, “Cuales son deseos de la carne” “Que es codicia de los ojos” “La arrogancia de la vida”.

Las Pasiones, Posesiones, Posiciones. Eso es sexo, salario, status, eso es avaricia, eso ambición, eso es apetito. 

Así que vemos estas filosofías y que hay de las expresiones culturales, si quieres puedes llenarlo en tus notas, déjame darte un par de slogans. 

• Si se siente bien hazlo ➡️  Hedonismo ➡️  Los deseos de la carne ➡️  Pasión
• Consigue todo lo que puedas ➡️  Materialismo ➡️  La codicia de los ojos ➡️  posesión
• Siempre tienes que ser el #1 ➡️  Humanismo ➡️  Arrogancia de la vida ➡️  posición 

Si quieres volverte un creyente alerta vas a ver que estas tres tentaciones se han infiltrado en cada área de nuestra sociedad y todo tipo de propagandas y publicidades son simplemente: Pasión, Posesión y Posición. 

En el corazón de cada tentación existe un reto para el carácter de Dios. 

Un aspecto diferente para el carácter de Dios y los deseos de la carne, el cual es “tengo que tenerlo, tengo que tenerlo ahora, y debo convertir las piedras en pan”. Esto nos reta, escribe esto, nos reta a la suficiencia de Dios. Los deseos de la carne, nos retan a la suficiencia de Dios. Y dice: “yo no creo que Dios se haga cargo de mis necesidades”, como las necesidades físicas, necesidades sexuales, mis necesidades nutricionales, necesidades emocionales, “yo no creo que Dios se haga cargo de mis necesidades, así que tendré que hacerme cargo por mí mismo”. Eso está retando la suficiencia de Dios, está dudando de las promesas de Dios.

¿Qué tal la codicia de los ojos? El materialismo. Obtener cosas y hacemos ídolos de estas cosas, es una tentación que nos reta a la santidad de Dios.  ¿Qué significa esto? Bueno, la biblia nos dice: “no tendrás otros dioses delante de mi” ese es el primero de los diez mandamientos. Y el segundo mandamiento nos dice: “no harás ningún ídolo” esto es un reemplazo de Dios. Todo lo que ocupe el primer lugar de tu vida que no sea Dios, es un ídolo. Y cada vez que creas un ídolo en tu vida, estas retando la santidad de Dios. Y la santidad de Dios significa, no tendrás otro dios sino Dios. No debes tener ídolos en tu vida, nada debe siquiera competir con Dios. Ninguna relación debe competir con Dios. Así que, la codicia de los ojos reta la santidad de Dios. 

Y luego viene “La arrogancia de la vida” esta tentación reta la soberanía de Dios. Porque cuando dices: “yo voy a ser mi propio Dios” “voy hacer lo que yo quiero” “yo voy a ser quien quiero ser” “yo voy a hacer lo quiero hacer” “voy a vivir como quiero vivir, nada me detendrá” “seré el dueño de mi propia fe”. Estas retando la soberanía de Dios, estas retando el derecho de Dios a ser el jefe de tu vida. Sabes, no es que los ateos no puedan creer en Dios, sino, que ellos no quieren creer en Dios porque la verdad es, que ellos no quieren un jefe.

Los 3 Antifotos

El primer antídoto lo encontramos en 1 Corintios 13 que es por supuesto el capítulo del amor, dice “si hablas en lenguas humanas y angelicales y no tengo amor, no sirve de nada” y continúa dando una descripción completa de lo que es realmente el amor, lo que por cierto si observas es la imagen de Jesús. Y luego en el verso 13 dice esto: “y ahora, permanecen estos tres: fe, esperanza y amor, pero el mayor de ellos es el amor”. 

Ahora ¿Por qué estas cosas? ¿Por qué son estas tres cosas las más importantes de la vida? Porque son los antídotos a las tres grandes tentaciones de la vida. 

1. El antídoto a los deseos de la carne es el AMOR.  

Escribe en la columna uno: El antídoto a los deseos de la carne es el amor. El deseo se trata de tener, el amor se trata de dar. El amor siempre puede esperar para dar. El deseo nunca puede esperar para tener. El deseo es tener, tener, tener, tener. El amor es dar, dar, dar, dar. “De tal manera amo Dios al mundo que dio…” tú puedes amar, puedes dar sin amar, pero no puedes amar sin dar. El amor es dar, el amor se deletrea D.A.R. El amor y el deseo son polos apuestos. Sabes muchas de las canciones de amor en la radio no son en realidad canciones de amor, son canciones de deseo. “te quiero” “quiero tenerte” “te necesito” “apriétame” “compláceme” “satisfáceme” “quiero tenerlo ahora” eso no es amor, es deseo. “dámelo, dámelo, debo tenerlo o si no lo voy a tomar” eso no es amor, es deseo. Tantas canciones, de hecho, muchas canciones son canciones de co-dependencia. Por ejemplo: “ahora que te encontré, no puedo dejarte ir” “construí mi mundo alrededor tuyo, así que, te necesito” “baby ahora que te encontré, no voy a dejarte ir, construí mi mundo alrededor tuyo, así que te necesito, aun si tú no me necesitas” “te necesito” eso no es amor, eso es co-dependencia. Eso no es una canción de amor. Muchas canciones de amor, son en realidad canciones de deseos, se tratan de lo que necesito, lo que deseo, lo que quiero tener. Sabes, el amor siempre se trata de dar, no se trata de ti. Cuando amas a alguien no sacas provecho de esa persona. Cuando amas a alguien no rompes su corazón, cuando amas a alguien no lo traicionas. 

2. El antídoto a la codicia de los ojos es la ESPERANZA. 

La esperanza, porque la esperanza se almacena en el cielo. Y muchas ocasiones en la escritura Jesús dijo “no se hagan para ustedes mismos tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, sino acumulen tesoros en el cielo” observa nuevamente este versículo ACUMULEN TESOROS EN EL CIELO. ¿Sabías que puedes acumular tesoros en el cielo para ti mismo? ¡Para ti mismo, en el cielo!. Sí, puedes abrir una cuenta bancaria en el cielo y acumular para ti mismo tesoros en el cielo. Así que puedes acumular tesoros aquí o puedes acumular tesoros en el cielo. Si acumulas tesoros en la tierra como máximo los disfrutaras 80 años. Si acumulas tesoros en el cielo lograras disfrutarlo por la eternidad ¿Dónde quieres acumular la mayoría de tus tesoros? Todo lo que acumules aquí, vas a dejarlo atrás. Estoy dejando la menor cantidad posible aquí, para poder acumular tesoros en el cielo. Ahora, solo hay una sola manera de acumular tesoros en el cielo: enviándolo anticipadamente y la forma de enviarlo anticipadamente es invirtiéndolo en gente que va hacia allá. Cuando tú inviertes en la iglesia, cuando tú inviertes en ganar almas para Cristo, estas acumulando tesoros en el cielo. Ahora, yo puedo depositar mi esperanza en mi cuenta bancaria aquí o depositar mis penas en mi cuenta bancaria en el cielo. Cuando vivo por esperanza el materialismo no tiene atracción sobre mí. Cuando vivo con la esperanza del cielo y yo sé que estoy aquí por un corto tiempo, que la vida solo es una asignación temporal, una prueba, una encomienda y que aquí solamente soy un extranjero, que solo soy un visitante. Mi verdadera residencia es en el cielo, en la eternidad. No estoy preocupado en amasar una enorme fortuna aquí o apilar mucho dinero. El dinero es una herramienta para ser usada, no amada. El dinero es como fertilizante, como estiércol, si tú lo esparces haces las cosas crecer, pero sí lo apilas, solamente apesta.

3. El antídoto a la arrogancia de la vida es la FE.

¿Por qué? Porque la esencia de la fe es depender de Dios. Eso es lo que es la fe y mientras más yo dependo de Dios más me convierto en una mujer de fe. La fe es totalmente opuesta a la arrogancia de la vida. La arrogancia de la vida dice: “si debe suceder depende de mí”. La fe dice: “si va a suceder depende de Dios”. “Dios tiene que sacarme de esta, soy totalmente dependiente de Dios” y yo hice, no una declaración de independencia sino una declaración de dependencia y le dije: “Dios dependo completamente de ti, dependo completamente de ti, para lograrlo en este día, en esta semana, en este año, en esta vida”. 

Por cierto, dice: “fe, esperanza y amor, pero el mayor de estos es el amor”. ¿Sabes por qué? Porque no necesitaras fe o esperanza en el cielo.  El amor es el único que es eterno. La fe no es eterna, cuando llegues al cielo, no necesitaras fe, ya está allí. Veras todo desde la primera fila. Cuando llegues al cielo no vas a necesitar esperanza porque vas a estar allí. Así que, la fe y la esperanza algún día terminaran, pero el amor es para la eternidad. Es por eso que si basas tu vida en el amor “ama a Dios con todo tu corazón y a tu prójimo como a ti mismo” estarás construyendo para la eternidad.

Ahora terminare con en Mateo 16:24, Jesús dice tres cosas y estas tres cosas nuevamente son los antídotos a las tres grandes tentaciones de la vida. 

“luego dijo Jesús a sus discípulos: si alguien quiere ser mi discípulo tiene que, (y estas son las tres cosas) negarse así mismo, tomar su cruz y seguirme. Porque el que quiera salvar su vida la perderá y el que pierda su vida por mi causa la encontrara. De qué sirve ganar el mundo entero si se pierde la vida o que se puede dar a cambio de la vida”. Ahora, Jesús dice tres cosas. Si quieres ser un discípulo, si quieres ser un seguidor, si quieres seguir a Cristo, tienes que negarte a ti mismo, tomar tu cruz y seguirme. Esto no es un accidente. El antídoto a los deseos de la carne es: negarte a ti mismo. En lugar de complacerme a mí mismo, en lugar de complacer mis apetitos, en lugar de complacer mis pasiones, debo negarme a mí mismo. ¿y sabes qué? En algunas ocasiones es muy bueno negarte a ti mismo. Si no me niego a mí mismo, seguramente me volveré más gordo y gordo y gordo. 

Cuando vives por tus convicciones no por tus emociones. Te niegas a ti mismo.

Tomar tu cruz es el antídoto a la arrogancia de la vida. ¿Alguna vez has visto a alguien arrogantemente tomando una cruz? No, eso es humillante tomar una cruz. No entendemos lo que significa tomar una cruz porque hoy día la cruz es un símbolo de esperanza. Y la usamos en nuestro cuello orgullosamente porque es un símbolo de esperanza y una inspiración. 

Pero en esos días, en los días de los romanos la cruz era un símbolo de ejecución, y no solo eso, era un símbolo de tortura. Y no solo eso, era un símbolo de ejecución y tortura para la peor clase de criminales. Solo los criminales eran crucificados. 

Usar una cruz o una cadena alrededor del cuello en el primer siglo seria cómo cargar hoy día con una cadena silla eléctrica. Una silla eléctrica sobre tu cuello. La gente ¿Qué tienes en el cuello? Una silla eléctrica. 

Eso es lo extraño de todo esto, no conocemos el significado de la cruz y ya que es un símbolo de esperanza lo ponemos por todos lados, pero en esos días, para ellos, tomar tu cruz significaba, ven y muere. Eso significaba, ven y muere. Y en esos días nadie tomaba una cruz, a menos que los romanos lo clavaran a ella. Así que, cuando se habla de tomar su cruz, significa, me estoy humillando a mí mismo. Estoy tomando la cruz. No hay forma de tomar la cruz y seguir siendo arrogante. Así que si quieres un antídoto para los malos deseos de la carne es necesario negarte a ti mismo. Y el antídoto para la arrogancia de la vida es tomar tu cruz. 

Ahora también nos habla y nos dice, SIGUEME. Ese es el antídoto a la codicia de los ojos, porque tienes tus ojos fijos en Jesús. Cuando tienes tu mirada fija en Jesus no puedes tener tus ojos en las cosas. Si tienes tus ojos puestos en Dios, no puedes tenerlos en las posesiones. La codicia de los ojos desaparece cuando te enfocas. 

En las próximas sesiones hablaremos de reenfocarnos, necesitamos enfocarnos en Jesus y mantener nuestra mirada fija en EL. si nos negamos a nosotros mismos y tomamos nuestra cruz seremos capaces de manejar, las pasiones, posesiones y posiciones de la vida.

Quiero dejarte con las siguientes preguntas: 

¿Qué escuchaste? 

¿Cómo te hablo Dios en este mensaje? 

¿Hubo alguno de esos puntos que realmente te haya impactado?

¿Qué es lo que piensas? 

¿Te ha inquietado? 

¿Te ha desafiado? 

¿Quieres argumentar algo? 

¿Qué piensas de lo que acabas de escuchar?

¿Qué es lo que harás? 

¿Cómo piensas aplicarla? 

¿Qué vas hacer con lo que acabas de escuchar?

Te recuerdo que el video de esta sesión lo puedes ver en facebook.

Te mando un fuerte abrazo, Ana Romero