PLAN DE GUERRA

PLAN DE GUERRA

Si tenemos un enemigo que quiere destruirnos, entonces estamos en guerra; pero nuestra guerra no es como todas las guerras porque tenemos algo que otros no tienen. 

En Cristo tenemos la victoria ya ganada, mientras que el mundo nos dice constantemente que aprendamos “a vivir” con nuestras situaciones, a adaptarnos. 

Veamos lo que les dijo Jesús a sus discípulos: “… el mundo tendrán muchas pruebas y tristezas; pero anímense, porque yo he vencido al mundo. Juan 16:33 NTV

Jesús nunca dijo, “confíen, yo les voy a enseñar cómo vivir con estas aflicciones, pronto se adaptarán.” NOOOOOOOO!!!! Él ya venció al mundo y podemos estar en esta guerra confiadas de que ya tenemos la victoria, recuerda es una guerra que ya está ganada.

El dia de ayer hablábamos de algunos principios importantes acerca de nuestra guerra ganada, y hoy, como buenos estrategas de guerra, necesitamos tomarnos un tiempo para conocer a nuestro enemigo.

En primer lugar, es necesario e importante que sepas que tienes un enemigo. Hay dos extremos en cuanto a lo que muchos creen acerca del enemigo:

1. Unos creen que Satanás no existe y que es solo un mito todo esto del diablo y del infierno.
2. Otros creen que sí existe, pero le atribuyen mucho más poder que el que realmente tiene. Tienden a estar buscando demonios por todos lados y no ubican el poder de Satanás en la perspectiva correcta. Le atribuyen a Satanás características que solo le pertenecen a Dios.

Veamos la perspectiva correcta acerca de nuestro enemigo. Al estudiar cuáles son sus características podremos ubicarlo en el lugar correcto y darle la dimensión que realmente le corresponde.

Es importante que entiendas lo siguiente…

1. Satanás no sabe todo.
2. Satanás no puede leer tu mente, solo se entera de lo que tú hablas.
3. Satanás NO es todo poderoso.
4. Satanás no es omnipresente, no puede estar en dos partes a la misma vez. Si él está ocupado con alguien, tiene que enviar a un subordinado a atender cualquier otra cosa que se tenga que atender. 

Muchas veces, precisamente porque no es omnipresente, el enemigo nos manda un ataque y nosotros nos encargamos de todo lo demás en el momento que lo recibimos y decidimos creer sus mentiras en lugar de echar mano de los recursos de Dios.

1. Satanás está buscando a quien robar. El significado en el griego de esta palabra es KLEPTO (cleptomanía) Juan 10:10
2. Satanás está buscando a quien matar. El significado en el grigo significa THUO que denota primariamente ofrecer primicias a un dios; luego: sacrificar dando muerte a una víctima, ofrecer sacrificios.
3. Satanás está buscando a quien destruir. El significado en el griego APOLUMI que significa destruir totalmente; en la voz media, perecer. La idea que comunica no es la de extinción, sino de ruina; no del ser, sino del bienestar de la persona.
4. Satanás está buscando a quien devorar. Satanás no puede devorar a cualquiera, en el original, el verbo “buscar” implica ver a quien PUEDE “devorar”.  I de Pedro 5:8
5. Satanás es un mentiroso. Su táctica siempre será hacerte creer que no tienes lo que ya tienes. 
6. Satanás está vencido. La muerte y resurrección de Jesús vencieron a Satanás por siempre. Colosenses 2:15 

 

Hubo un tiempo en el que Satanás tenía poder, pero todo su poder le fue quitado en la cruz. Colosenses 2:15 dice que Él “desarmó” “despojo” al enemigo. 

Si el enemigo ya está vencido y desarmado, entonces no debemos entrar a la guerra espiritual pretendiendo ganar una guerra que ya fue ganada. Esto sería soberbia espiritual, el creer que Dios necesita nuestra ayuda para vencer al enemigo.

Hay muchas personas hoy en día que viven esforzándose por vencer al enemigo en sus vidas y se sienten muy orgullosos de que todas sus disciplinas espirituales les estén dando esta victoria. Este es un tipo de orgullo o soberbia espiritual. 

Dios no necesita que venzas al enemigo que Él ya venció hace 2,000 años cuando murió en la cruz. Tu parte no es vencer, tu parte es “estar firme” Efesios 6:11, 13, 14. 3 veces (en el original, 4) el Espíritu Santo utiliza la frase “estar firmes”; el enemigo ha sido derrotado, tu parte es ejecutar la derrota. Dios ya obtuvo la victoria, tu parte es establecer y vivir la victoria.

En cualquier lucha que enfrentes, si utilizas los métodos de Dios, permanecerás de pie, estarás firme. Si entendemos claramente lo que significa estar firmes, nos quedará bien claro que no se trata de pelear, sino de “estar.” 

Ahora, ¿Cómo podemos simplemente estar? Veamos el método de Dios:

El método de Dios es sencillísimo. A nosotros nos gusta complicarlo. Él nos ha dicho que en Cristo tenemos TODO, Satanás es un mentiroso y su táctica siempre será hacernos pensar que algo nos falta.

Por ejemplo, imagínate que tienes una necesidad económica, ves tu cuenta de banco y te das cuenta que lo que hay allí no es suficiente. El enemigo envía sus dardos de duda y llegan esos pensamientos de “no te alcanza, ahora ¿cómo le vas a hacer? Si diste tus diezmos y ofrendas, ¿cómo es posible que te haga falta? … 

Este es el momento de mantenerte firme en lo que Dios te ha dado y cambiar la narrativa declarando: “no tengo mucho, tengo TODO. No estoy tratando de ser rica…SOY rica porque tengo todo lo que necesito en Cristo Jesús. 

Mi cuenta de banco no refleja mi realidad, yo se que cuando llegue el momento de la necesidad, Él suplirá de acuerdo a Sus riquezas en gloria porque así lo ha prometido.” Wowww!! que diferencia ¿no crees? O tal vez, empiezas a sentir síntomas de enfermedad, viene el enemigo con el ataque.. “Hm!  ya estás sintiéndote mal. Estás enfermo, ahora ¿cómo le harás para obtener tu sanidad y tu salud?”

Tu narrativa: “Satanás, no estoy tratando de estar sana, SOY sana porque Cristo pagó por mis enfermedades en la cruz. Tú estás tratando de robar mi sanidad, pero ya ha sido comprada por la Sangre del Cordero. Lo que pueda ver o sentir es temporal, la Verdad es que soy sana por las llagas de Cristo.”

Cuando respondemos con el método de Dios, estando firmes, entonces estamos peleando DESDE la victoria y no para OBTENER la victoria. La clave para poder hacer esto es la armadura de Dios. Todo lo que necesitas lo tienes en Dios. Jesús usó una armadura mientras caminó por la tierra y la ha dejado para que tú y yo la podamos utilizar mientras que esperamos nuestra reunión con Él en los cielos. 

Por eso se llama LA ARMADURA DE DIOS. La única manera en la que podemos establecer la victoria que nos ha sido dada es a través del poder de Cristo. 

Ya tenemos claro que habrá días y tiempos difíciles, pero tenemos la certeza de que Su Armadura es la clave para que podamos establecer Su victoria sobre esos días malos. 

¿Por qué Su Armadura? Porque cuando tú estás vestido de Su Armadura, el enemigo no puede saber qué tan débil eres o qué tan capaz eres, Él lo único que puede ver es la Armadura que lo venció 2000 años atrás sobre un madero. Cuando tú estás vestida de Su Armadura el enemigo no te puede identificar, te ves como se veía Jesús mientras caminó sobre la tierra. Me encanta!!!!!!

En la vida tendremos días difíciles, la palabra de Dios les menciona como días malos, pero Jesús nos dijo “Confiad YO HE VENCIDO AL MUNDO.” Es vestidas de Su Armadura en la que podemos vivir confiados, permaneciendo firmes en medio de la lucha, sabiendo que Él ya nos ha dado la victoria y que solo es cuestión de un poco de tiempo para que la podamos ver materializarse. 

Si te das cuenta, ¡Ya la tienes hecha! Dios lo ha hecho todo por tí. ¿Puedes creerle y estar firme mientras que el enemigo tira sus “patadas de ahogado” en lo que Cristo nos llama a Su presencia? ¿Puedes vivir en gozo, libertad, confianza y seguridad en lo que el enemigo sigue tratando de engañarte? Sí, sí puedes – Él ha provisto lo que necesitas para poderlo hacer. Él ha provisto SU ARMADURA.

Quiero dejare con este pensamiento:

1. No pierdas la perspectiva de la realidad acerca de tu enemigo. 
2. Lucha desde la victoria y no para obtener la victoria. 
3. Usa el método de Dios.

 

Te mando un fuerte abrazo y bendiciones, Ana Romero