VESTIDAS DE SU ARMADURA

¿PORQUE UNA ARMADURA? 

Al nacer de nuevo hemos recibido una infinidad de beneficios y nuestra identidad ha cambiado: “Somos hijas de Dios” y como hijas de Dios recibimos todos los beneficios de Su Gracia: Salvación, Favor, Salud, Bendición, Prosperidad en tu vida, etc.

Como hijas de Dios también recibimos algo que tal vez no hemos tomado en cuenta: Un enemigo. Cuando no eras hija de Dios, Satanás te consideraba su aliado – eras alguien que vivía en el reino de las tinieblas. Veamos lo que Su palabra nos dice en estas dos versiones:

Hechos 26:18

• “Para que les abras los ojos y se conviertan de las tinieblas a la luz, y del poder de Satanás a Dios, a fin de que, por la fe en mí, reciban el perdón de los pecados y la herencia entre los santificados”. NTV
• “ Quiero que hables con ellos, para que se den cuenta de todo lo malo que hacen, y para que comiencen a obedecer a Dios. Ellos ahora caminan como si estuvieran ciegos, pero tú les abrirás los ojos. Así dejarán de obedecer a Satanás, y obedecerán a Dios. Podrán creer en mí, y Dios les perdonará sus pecados. Así serán parte del santo pueblo de Dios.” TLA

Efesios 5:8

• “ Porque ustedes antes eran oscuridad, pero ahora son luz en el Señor. Vivan como hijos de luz” NVI
• “No conocer a Dios es como vivir en la oscuridad, y antes ustedes vivían así, pues no lo conocían. Pero ahora ya lo conocen, y han pasado a la luz; vivan entonces como corresponde a quienes conocen a Dios” TLA

Cuando vivíamos en las tinieblas participamos de las obras de las tinieblas, Satanás nos tenía justo donde quería. Tal vez no vivías en las tinieblas, pero vivías bajo la ley y de alguna manera el enemigo te tenía cegado a los verdaderos beneficios de tu Salvación y también te tenía en un lugar en donde iba a ser más fácil vencerte. 

Ahora que estamos en la luz, que has recibido la revelación de Su Gracia y la Salvación, has pasado a ser parte del Reino de Dios y eres hijo de Dios. Satanás ahora te considera un enemigo y tú le consideras un enemigo a él.

Ahora, es importante entender que el enemigo principal de Satanás es Dios; pero como Satanás no puede atacar a Dios directamente porque sabe bien que quedaría fulminado – ataca a la imagen de Dios, si, tu y yo.

Génesis 1:26-27 “Al ver Dios tal belleza, dijo: «Hagamos ahora al ser humano tal y como somos nosotros. Que domine a los peces del mar y a las aves del cielo, a todos los animales de la tierra, y a todos los reptiles e insectos». Fue así como Dios creó al ser humano tal y como es Dios. Lo creó a su semejanza. Creó al hombre y a la mujer” TLA

“Entonces Dios dijo: «Hagamos a los seres humanos a nuestra imagen, para que sean como nosotros. Ellos reinarán sobre los peces del mar, las aves del cielo, los animales domésticos, todos los animales salvajes de la tierra y los animales pequeños que corren por el suelo» Así que Dios creó a los seres humanos a su propia imagen.  A imagen de Dios los creó; hombre y mujer los creó.” NTV

Y dijo Dios, “HAGAMOS AL HOMBRE A NUESTRA IMAGEN….”

Tal vez te preguntes: ¿Por qué si el enemigo ya está vencido puede atacarme? ¿Por qué si el favor, la protección y la sangre de Cristo me cubre puede atacarme el enemigo?

El enemigo anda buscando a los que andan libres y vivos para lograr que caigan al reino de las tinieblas. Él no está interesado en los muertos sino en los vivos.

Esto no quiere decir que andas libre sin ninguna protección a la merced de los dardos del enemigo. Dios ha provisto la armadura que necesitas para que “puedas estar firme contra los ataques del diablo.” 

Efesios 6:11 “Pónganse toda la armadura de Dios para poder mantenerse firmes contra todas las estrategias del diablo” NTV

“Protéjanse con la armadura que Dios les ha dado, y así podrán resistir los ataques del diablo” TLA

Antes de comenzar estudiar esta armadura es importante que tengamos claros algunos principios para que tengamos la verdad bien clara de cómo es esta lucha que tenemos:

1. Tendremos luchas »  Juan 16:33 “Les he dicho todo lo anterior para que en mí tengan paz. Aquí en el mundo tendrán muchas pruebas y tristezas; pero anímense, porque yo he vencido al mundo”
2. Ya tenemos la victoria sobre nuestras luchas. » I Juan 5:4 “Pues todo hijo de Dios vence a este mundo de maldad, y logramos esa victoria por medio de nuestra fe”
3. Nuestra lucha no es para vencer (ya tenemos la victoria) sino para estar firmes » Efesios 6 “ Mantenerse firmes” “Seguirán de pie, firmes” “completamente preparados”

Cuando entendemos estos tres principios, podemos entender lo que significa luchar desde la victoria, el estar protegidos en contra de los dardos de fuego y tendremos poder de apagarlos al mantenernos firmes. 

De la misma manera, Dios ha provisto una armadura para que tú puedas seguir en el vuelo que has emprendido como Su hija. Puedes vivir confiada cuando estás vestida de la Armadura de Dios porque puedes tener la seguridad de que tienes ya ganada la victoria – no por tus tácticas de guerra, sino por la Obra Completa de Jesús en la Cruz que te viste.

¿Qué imagen has tenido de tu armadura y de tu lucha? Una imagen de un soldado desesperado luchando contra un enemigo difícil de vencer? ¿Una guerra incesante de múltiples bombardeos y ataques donde a veces ganas y a veces pierdes?

El enemigo quiere que vivas engañado, pensando en que esta es la imagen correcta. Pero tu Padre Celestial te dice: “Confía.” 

Un soldado que lucha confiado, lucha a pesar de lo que su humanidad sienta lo hace, a pesar de que tenga temor, aun asii lo hace. Tu Padre Celestial te dice: “Yo ya vencí.” Un soldado que sabe que ya ganó lucha con seguridad y gusto. 

Durante este taller estaremos aprendiendo el significado de cada pieza que forma la armadura de Dios descrita en Efesios 6. Al Final de nuestro taller nos daremos cuenta que cada pieza de la armadura representa diferentes aspectos de la obra completa de Jesús en la Cruz y de cómo podemos disfrutar los beneficios de la vitoria que el gano para nosotras a través de su muerte y resurrección. 

Durante la pascua, había 4 tipos de personas: 

1. Aquellos que no creyeron a Dios y confiaron en sus dioses falsos, en su propia justificación y perdieron a sus primogénitos.
2. Aquellos que creían en Dios, pero que no aprovecharon los beneficios de la sangre del cordero y perdieron a sus primogénitos por no haber marcado sus puertas con su sangre. 
3. Aquellos que creyeron a Dios, sacrificaron al cordero, marcaron sus puertas y comieron del cordero asado, pero permanecieron dentro de sus casas llenos de temor mientras pasaba el ángel de la muerte y ellos eran librados. 
4. Por último, hubo aquellos (SEGURAMENTE MOISÉS Y SU FAMILIA, UN CALEB, UN JOSUÉ) que le creyeron a Dios, marcaron sus casas, comieron del cordero y lo hicieron con gozo, seguridad y confianza, sabiendo que la victoria y la salvación que la sangre del cordero les daba. 

El propósito de este taller es que aprendamos a vivir la vida como el grupo #4, sabiendo que el enemigo pasará por nuestras vidas, pero con la seguridad de que estamos cubiertas por la sangre de Cristo y el cuerpo del cordero (NUESTRA ARMADURA). Abrazando esta verdad podremos vivir seguras en casa de nuestro padre, gozándonos, disfrutando de la victoria que nos ha dado, permaneciendo firmes en contra de los ataques del enemigo. 

 

Saludos,

-Ana Romero